En esos casos, debemos saber que en ocasiones tendremos una ineficiencia, puesto que lo que se retiene en origen y lo que se puede deducir en España no es siempre neutro, como vimos en el artículo de cómo tributan los dividendos de acciones extranjeras. En el IRPF del año siguiente, podemos recuperar la retención en origen hasta un máximo Los dividendos solían ser el principal objetivo de los inversores al comprar acciones de una compañía. Los inversores esperaban que les pagasen el concepto de dividendos. A menudo, las empresas deciden reinvertir el dinero en la empresa, mientras que los accionistas e inversores esperan que los ingresos aumentarán. Y, en tercer lugar, en relación con su naturaleza, sabemos que los dividendos liquidados por la empresa a sus accionistas, con carácter general, no representan contablemente un gasto del ejercicio, se califica como una aplicación de resultado; planteamiento que en el ámbito fiscal se extiende a todos los casos, excepción hecha, por